
de aquella triste etapa, culpa mía.
Aquellos versos grana cual sangría,
de roja tinta errada como ultraje.
Porqué pensar que oculta por celaje,
poder amar y amar asaz y umbría,
en esta cruel manera de ser mía,
si donde amar, exceden los ambages.
En un camino torvo con peaje
quizás mirar atrás es cruel abrojo,
o inútil es querer salir airoso.
Del fondo del infierno del antojo.
salir indemne pido, y pongo arrojo,
¡destino! abriga tenue mis despojos.
¡¡¡Soberbio!!! todo cuanto se diga de más... sobra... salvo los besos.
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